La estación de esquí de Gemsstock, perteneciente al dominio de Andermatt (Suiza), ha ensayado en los últimos tres veranos un curioso sistema para frenar el deshielo del glaciardonde se asientan las pistas: han cubierto las zonas más sensibles con lonas de poliuretano que las protegen de la radiación solar. Se trata por supuesto de una medida mitigadora, no salvadora, pero la experiencia se ha saldado con notable éxito, dice Marcia Phillips, investigadora del Instituto Federal de Nieve y Aludes de Davos. El área que queda cubierta en el glaciar Gurschen es por ahora pequeña, unos 4.000 metros cuadrados, pero es sorprendente lo bien que se conserva. Las lonas se retiran en cuanto empieza a remitir el calor, aunque ya se está pensando en un sistema biodegradable.
